Las tías: Mariana, una madre soltera y decidida, se enfrenta a un desafío constante: ayudar a su hija, Sofía, a superar las barreras del autismo y encontrar su voz. Con la esperanza de un milagro, Mariana decide mudarse a una antigua casa familiar, un lugar cargado de historia y misterios, para someter a Sofía a un tratamiento experimental.
La casa, una imponente mansión ubicada en un entorno aislado, se revela como un personaje más de la historia. Sus habitaciones polvorientas, sus pasillos oscuros y sus extraños sonidos crean una atmósfera opresiva que sugiere la presencia de fuerzas sobrenaturales. Al principio, la terapia parece dar frutos. Sofía, que hasta entonces apenas emitía sonidos, comienza a hablar fluidamente, expresando pensamientos y sentimientos que asombran a su madre. Sin embargo, esta repentina capacidad verbal viene acompañada de cambios inquietantes en el comportamiento de la niña.
A medida que avanza la historia, Mariana descubre que Sofía ha establecido una conexión con entidades oscuras que habitan la casa. Estas entidades, torturadas almas del pasado que guardan rencor y buscan venganza, se aprovechan de la vulnerabilidad de la niña para manifestarse y hacer oír sus voces. Los espíritus, que parecen conocer los secretos más oscuros de la familia, revelan una serie de eventos trágicos ocurridos en la casa, creando una atmósfera de terror y suspenso.
A medida que la presencia de los espíritus se intensifica, Mariana se ve obligada a enfrentarse a sus propios miedos y a las fuerzas sobrenaturales que amenazan a su hija. La relación entre madre e hija se pone a prueba mientras luchan juntas por sobrevivir y romper las cadenas del pasado. La película explora temas como el amor maternal, la culpa, la pérdida y el poder de la conexión entre los vivos y los muertos.